La cámara que mira a los bebés

Imagina un mundo donde las cámaras y las tecnologías en general sustituyen a las personas, así fantaseaban las películas de ciencia a ficción cuando yo era pequeña. Pues bien, ya estamos, ya vivimos en ese mundo donde casi hemos olvidado mirarnos a los ojos y en ocasiones deseamos que el otro no esté para hacer el amor con nuestras pantallas, que amantes y sumisas nos prometen satisfacción inmediata y relaciones duraderas, al menos hasta el siguiente modelo ofertado.

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